Esta es una ruta muy agradable para recorrer en un día y también es apta para mezclarla con otros recorridos y hacer un viaje de fin de semana. Este tramo parte de El Cacao en Panamá Oeste y llega a Jordanal pasando cuatro ríos: El Cacao, El Cirí, la Quebrada Ardenilla y Quebrada Jordanal. Tal como me gusta, hay amplia oportunidad para refrescarse varias veces durante el recorrido. Mi parte favorita es la trepada del Río Cirí a Piedras Blancas, un pequeño poblado clavado en las faldas del Cerro San Andrés (1,026 metros).
El camino sigue el Río Cacao hasta tomar la Loma del Naranjito rumbo a Altamira, a 500 metros de altura. En Altamira nace una quebrada del mismo nombre, tiene su escuela, y vista panóramica (supongo que de ahí viene el nombre). Poco después pasamos por Los Rangos, otro caserío en altura con buena vista al valle del Río Cirí. De aquí bajamos al Río Cirí, una de las fuentes de agua importantes para el Lago Gatún. Hablando de agua, el Río Cacao se une al Río Trinidad, otro de los afluentes importantes del Lago. Desde El Cacao se puede bajar en kayak y canoa hasta el Lago Gatún y luego remar hasta La Arenosa, otro paseo interesante que parte de El Cacao.
Peñas Blancas está a 550 metros de altura y su nombre se deriva de unos enormes monolitos de piedra caliza que se pueden ver desde lejos. Peñas Blancas tiene un buen trapiche y hacen chicha de caña y guarapo. Por su altura es un lugar muy fresco y con una vista panorámica de todo el valle del Río Cirí. Todavía conserva varias casas de quincha con su techo de paja y se puede ver que cultivan caña, maíz, ñame, otoe, y mucha naranja. El tiempo no tiene apuro en este lugar que posiblemente estaba igual hace doscientos años atrás.
El tramo que sigue de Peñas Blancas hasta Jordanal es a través de un bosque de altura que está bastante intacto y es uno de los grandes atractivos de esta ruta que sube hasta 754 metros de altura. La bajada hacia Jordanal eventualmente llega a el valle de la Quebrada Ardenilla. El terreno relativamente plano de este lugar ha sido aprovechado para crear potreros para pastar unas cuantas cabezas de ganado. Aquí se ve que ha vivido el hombre desde hace mucho tiempo. Ya solamente queda una trepada más para caer a la quebrada Jordanal y llegar al destino de este paseo. Si tienen ganas de seguir caminando, son 10kms hasta El Valle. Lo fácil es montarse en un pick-up y salir en 4×4 para llegar al mercado de El Valle de Antón.
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