Caminar a través de Darién es una experiencia inolvidable si ese tipo de aventura tiene algún atractivo para uno. El bosque primario en esa provincia es fantástico, mítico, y majestuoso. Los árboles primarios se levantan por encima de los 100 metros de altura, el docel del bosque es altísimo y cubre de penumbra el piso sin permitir que crezcan muchos arbustos debajo. Además, por lo inaccesible, hay muchos animales que aún viven en densidades que nos brindan la oportunidad de verlos: pacas, zaínos, venados coliblancos, todas las especies de monos y hasta jaguares si uno tiene suerte. Por el lado de las aves, abundan las guacamayas, en especial la azul con amarillo y la verde.
La ruta que he usado un par de veces sube por el Río Pito en San Blas y luego sigue el Río Tacartí hasta llegar al Río Membrillo. Este último río lo hemos caminado hasta Canán donde ya es suficientemente profundo para navegarlo hasta el Río Chucunaque. Por desgracia ya han desmontado casi todo el bosque entre el Chucunaque y la Vía Interamericana y ahora están avanzando del Chucunaque hacia la montaña. Pero el tramo hasta Canán aún está bastante intacto. El Río Tacartí tiene una poza que parece una piscina olímpica con agua cristalina y llena de peces. Hace rato quiero regresar a pasar la noche en ese lugar.
El Membrillo se va haciendo cada vez más profundo y amplio pero hay senderos que cortan todos los meandros que hace el río. La caminata es en parte por el río y otra parte por los atajos. Del lado de San Blas el Río Pito rápidamente se queda atrás para iniciar una gran trepada hasta unos 700 metros de altura para luego cruzar al Tacartí. De ese momento todo el camino es un leve descenso y se puede notar como el bosque va cambiando con la altura y los árboles se van volviendo más inmensos cuando uno va llegando a tierras más bajas hasta llegar a las aldeas de los Emberá Wounan, el próximo paso.
Ruta en Wikiloc: https://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=20061954
Fotos en Google: TransDarien