El Reto del Indio 2008
Este sábado 12 y domingo 13 de enero hicimos el Reto del Indio 2008, el cuarto que hemos hecho. Quisiera decir que cada vez se pone más fácil, pero en realidad con cada Reto hemos adquirido experiencia y conocemos mejor lo que hay que hacer pare terminar El Reto del Indio en menos tiempo. Este año partimos de Chumicho el sábado a las 6:26am y llegamos a Boca de Río Indio a las 6:46pm el domingo, todavía con algo de luz. Con todo y las largas horas que ya traíamos encima, Rolando y Dimas se enfrascaron en una competencia de velocidad contra Rogelio y yo que duro casi media hora. Al final perdimos el duelo los viejos, pero solo por un par de minutos.
En este Reto hemos tenido la mayor participación de todos los Retos, y todos los que se enfrentaron a cada etapa la lograron terminar. Eso para mi es motivo de gran satisfacción. El Reto del Indio ha logrado motivar a muchos amigos a mantenerse entrenando a través del año para poder tener un mejor desempeño en el próximo Reto del Indio. Andrés Correa es un claro ejemplo de esto: el año pasado vino por la bicicleta y terminó remando también. Y desde entonces se estuvo preparando para este año, logrando un excelente desempeño. Igualmente, Irene Caballero se preparó desde octubre para este Reto e hizo la pedaleada en muy buen tiempo.
Los ocho que completamos El Reto del Indio 2008 fuimos: Daniel Brostella, Andrés Correa, Eugenio Estrada, Dimas Pino, Rolando Chamorro, Robert Sauner, Roger Bennett y su hermano. De todos, el que más me sorprendió fue Robert por qué se anotó a último minuto, se divertió parejo, nos hizo reir a todos, y el lunes a las 8:00am estaba feliz, de vuelta en su trabajo. Debe ser esa sangre austriaca que tiene. Como siempre, la caminata resultó la prueba más fuerte: varios sufrieron mucho por sus rodillas. Tengo una foto con Eugenio bajando una loma caminando hacia atrás, y me dijeron que Rolando bajó las últimas lomas sentado. Kathy Herold, y mi sobrino Tino Nellos, nos acompañaron en la caminata. Kathy, que tiene mucha experiencia caminando esta ruta, terminó con el talón derecho en carne viva – pero nunca se quejó ni un poco.
Este año completamos todas las etapas en buen tiempo. Según prueban las fotos, partimos de Chumico a las 6:26am, y a las 11:30 ya estaban todos los ciclistas del grupo en Río Indio Nacimiento. Y esto a pesar de un enredo que hubo en el mercado de El Valle por que un conductor se había quedado dormido en Chumico. 5 Horas del nivel del mar hasta Río Indio Nacimiento, subiendo hasta La Mesa antes de bajar, es una tremenda pedaleada. Irene Caballero, Miguel Garuz, Ramiro, y Antonio Grijalba (quien también nos acompañó en la caminata) completaron esta etapa junto con nosotros. En ocasiones anteriores, algunos de los que nos acompañaron a la pedaleada tardaron 5 horas en llegar solamente hasta el mercado de El Valle. El trillo de Las Guías estaba más pedaleable que nunca y pudimos subir a pedal muchas lomas que antes teníamos que caminar forzadamente.
A las 12:25pm ya estábamos entrando a la caminata. Logramos hacer la transición de la bicicleta a la caminata en menos de una hora. Nos ayudo mucho que Antonio puso su Patrol para traer las bicicletas extras de vuelta. En años anteriores teníamos que ver como montábamos 4 bicicletas por carro y siempre resultaba complicado. Por cierto que Antonio nos sorprendió a todos por que vino todo el tiempo pisándole los talones a los punteros, nunca se quedó en la retaguardia. En todo este Reto tomamos muy pocos descanso durante todo el trayecto. La caminata no fue ninguna excepción, pero si gozamos de nuestro merecido baño en la poza de Jordanal. Aunque breve, este baño es de rigor ya que resulta casi imposible pasar junto a esta charca sin que alguno se tire al agua. Casi que llegamos con luz a Las Claras Arriba. A las 7:33pm mi sobrino Tino ya estaba armando la estufa para cocinar la comida – venía con hambre el jóven. Para nuestra sorpresa, la escuela de Las Claras Arriba estaba toda iluminada con luz de lámparas fluorescentes que tomaban su energía de baterías caragadas por paneles solares. Y el teléfono de C&W funcionó este año…
A las 2:08am ya estaba tomando fotos de los aventureros que todavía estaban sin ganas de iniciar el segundo asalto. Un poco de café caliente, una avena más tarde, y sobras de chili con carne de la noche anterior fueron suficiente para que nos animáramos a continuar nuestra travesía. A las 3:30am ya estábamos tirando pata nuevamente. Este año el camino estaba más seco que el año anterior. Pero este año tomamos una ruta nueva, sin querer, que nos alargó un poco la caminata, llenando a algunos de incertidumbre y desconfianza sobre el futuro de su destino inmediato. Pero la experiencia es docencia y eventualmente llegamos a nuestro destino. A las 10:29 ya estábamos montándonos a los kayaks.
En los últimos dos Retos habíamos remado por lo menos 10 horas antes de llegar al Caribe. En el primer Reto del Indio habíamos hechado los kayaks en una revuelta después del pueblo de Tres Hermanas y solamente remamos 8 horas. La distancia entre un punto y el otro no es ni 10 minutos caminando. Este año volvimos a poner los kayaks en la revuelta y logramos bajar la remada a 8:20. No hubo necesidad de bajarnos de los kayaks ni una sola vez, cosa que resulta frecuente en el segmento de río que precede la revuelta. Resolvimos el problema de las dos horas extras en la remada con una pequeña caminada.
Realmente hace una diferencia grande llegar temprano a Boca de Río Indio. Este año pude acostarme a las 11:00pm del domingo. El año anterior apenas estábamos partiendo del mismo lugar a esa hora. También estamos en mejor posición para hacer un Reto del Indio 24 horas. Le hemos escrito a Guinness y estamos pendientes de su aprobación para ver si clasificamos para una marca como el cruce continental todo terreno más rápido del mundo. ¿Donde más se puedo hacer algo similar a El Reto del Indio?
La bicicleta nos tomó 5 horas, caminamos 7 horas el primer día, y 6 horas el segundo día, y remamos 8:20 minutos. Esos tiempos suman 24:20, bastante cerca de las 24 horas. Al principio pensaba que era una locura pensar que se podía hacer en 24 horas seguidas, y todavía lo sigo pensando, pero ya estoy considerando que es posible hacerlo.
Rompi..
Realmente es un reto, no un paseo, y un reto con uno mismo, con el indio que tenemos todos.
En medio de la caminada que es muy fuerte, uno se pregunta ¿que hago aqui?, pero hoy ya estoy pensando en el del proximo año, claro con un entrenamiento mas fuerte, aver si la rodilla no me falla.
MUCHAS GRACIAS por todo el apoyo y ayuda que Tu y Rogelio me dieron.
Tengo que ver la foto de la bajada para atras.
Eugenio